El edificio del Teatro fue construido en el año 1768 por el rey Carlos III. El arquitecto que llevó a cabo el trabajo fue Jaime Marquet.
El edificio tenía una fachada porticada con cinco arcos de ladrillo, y en el frontispicio se puso un grabado con la inscripción de Juan de Iriarte, Oficial Mayor de la Secretaría de Estado, que dice textualmente:
“Rudos deliciis urbana adjecta. Voluptas Jussu CAROLI TERTII. Anno MDCCLXVIII”
Su traducción viene a decir algo asi como que en Aranjuez se unen las delicias del campo con los placeres de la ciudad, el rey que lo construyó y el año de inauguración.
Dada la cercanía del rey, no se escatimó en gastos, y eso hizo que aquel fuera un magnífico edificio diseñado con gran esmero.
La bóveda interior contaba con frescos de grandes artistas.
El teatro estaba dividido en cuatro plantas: platea, palcos, anfiteatro y alta, y contaba también con un escenario y dos salas de tertulia. Tenía una capacidad para unas 500 personas y allí se representaron durante años óperas, comedias y dramas.
Su inauguración tuvo lugar el 14 de mayo de 1769, a la cual asistió el rey Carlos, Doña María Luisa de Borbón y toda la familia real, ocupando el correspondiente palco Real.
Después en los años 1828 y 1847, se realizan diversas restauraciones con pinturas de Felipe Reyes y bustos de autores dramáticos.
Entrados ya en el siglo XX, este teatro pasó a manos particulares pasando a llamarse Gran Teatro Maestro Guerrero. En él se exhibían obras teatrales, hasta que en sus últimos años llegó a funcionar como cine, e incluso llegaron a rodarse películas.
Sus puertas se cerraron en 1989.
Más tarde, un proyecto municipal intenta rehabilitarlo, paralizándose las obras en agosto de 1995. Solo queda en pie el frontal de 5 arcos y la piedra grabada por Juan de Ariarte.
Este edificio, joya arquitectónica del siglo XVIII , ya ha sido recuperado y ahora se llama Teatro Real Carlos III de Aranjuez.
El arquitecto Mariano Bayón ha sido el encargado de diseñar este proyecto.
El recuperado edificio cuenta con aquellos elementos originales que se habían conservado, como los frescos del techo o las vigas de madera en la cubierta del teatro.
La sala se ha conformado con los materiales originales restaurados en la forma también confirmada por los propios cimientos originales. Los vestíbulos y las estancias entre muros han sido objeto de una “paráfrasis arquitectónica” que pretende reseñar la intemporalidad de los materiales en sí mismos y en su unión, en la construcción y en los sistemas, sin ninguna aventura mimética ni estilística. La arquitectura en estado puro.
Además cuenta, con dos niveles de palcos sobre la de la planta baja y un nivel intermedio de asientos corridos, y una planta subterránea donde se ha ubicado la cafetería.
El Teatro Real Carlos III de Aranjuez abre de nuevo sus puertas el 5 de junio de 2014