‘Sole Sola’: la soledad en la era tecnológica

“Sole sola” sigue imparable su carrera hacia el éxito en la Sala Lola Membrives del Teatro Lara.  Una pequeña sala en la parte de abajo y al fondo que, sin embargo, nos ofrece un monólogo que merece la pena ver y que nadie debería perderse si quiere disfrutar de un buen rato de teatro. Pero mejor sin obligaciones, que la vida sabe mejor en libertad.  De eso sabe un poco Soledad Solá, la protagonista de esta ácida comedia escrita por Carlos Crespo en la que nada es lo que parece. O quizás sí.

Soledad sobrevive en soledad, valga la redundancia, agazapada detrás de un aparente éxito en las redes sociales. Actriz sin papel y sin presente prometedor, fuera de su ciudad natal y sin amigos que la ayuden, Soledad existe a través de un videoblog sobre belleza en el que todo tipo de mujeres le piden consejo. Su vida es un desastre, pero eso no puede mostrárselo a sus seguidoras, por esa razón ante la cámara siempre sonríe y usa adjetivos que, en su vida real, jamás usaría.

Úrsula Gutiérrez, espléndida

Un texto que trata con humor el tema de la soledad en estos tiempos de sobrecarga de comunicación y de redes sociales donde los vínculos reales no existen. La fragilidad de las relaciones personales, la dificultad para cumplir los sueños que esa sociedad, obsesionada por la imagen,  nos impone día a día, la frustración al no sentirnos bien con el personaje que hemos inventado para otros… Con una Úrsula Gutiérrez espléndida, que lo mismo canta, que llora, que se enfada o que se enternece con el gatito de su amiga.

Inmensamente divertida y capaz de transmitir al cercano público (siempre es una suerte poder estar tan cerca del escenario) toda la emoción que hereda de un texto agudo, canalla, tierno y crítico. Una suerte para la comedia contar con textos como estos y con actrices que los sepan desenvolver tan bien, como si fueran el regalo que son. Un regalo que continua en noviembre y diciembre en el Teatro Lara.

Por favor, no dejen de ir.