Llega a Madrid ‘Grinder, el musical’, ¡la locura!
01/07/2017
Susana R. Sousa
Los Teatros Luchana se visten de purpurina para recibir uno de los espectáculos más esperados de la temporada: “Grinder, el musical”, dirigido por Davo Marín y con dramaturgia del propio Marín y de Serena Altair.
Retorcía Teatre se funda en Barcelona en 2011. En 2012 estrenan “Vete a la mierda, mi amor”, en 2014 ganan la beca Despierta con “Discordant», montaje que les consagra como compañía y en 2016 llega “Grinder, el musical”, todo un acontecimiento que, ahora, se estrena en Madrid. Tercera producción de una compañía joven que nació con el difícil propósito de hacer disfrutar al público. Un propósito cumplido gracias a su lenguaje directo y a unos montajes arriesgados que traspasan el tabú sin dejar de lado la realidad y, por supuesto, el humor.
“Grinder, el musical” es un espectáculo que cuenta con 22 canciones originales, seis intérpretes y mucho, mucho sexo. Toma como punto de partida una aplicación imaginaria, “grinder” para ponernos frente a la realidad que imprimen las nuevas formas de relacionarse. Una maestra de ceremonias muy poco discreta, Miss Grinder (Irene Hernández), es la encargada de avivar los encuentros de los protagonistas. Cinco jóvenes presentados bajo seudónimo que buscan un encuentro fácil y rápido ¿o quizás algo más? Cinco perfiles como cinco soles inspirados en la realidad más inmediata: Empotrador (David Teixidó), Culo Tragón (Oscar Domínguez), GimxGim (Joan Vall), Busco Novio (Alberto Espinosa) y Discreto (Alex Marteen).
La obra nace de una experiencia personal en la aplicación real de encuentros para chicos gay y bi en la que se inspira el musical. La mentira, la discreción, la falta de compromiso, el deseo contenido, el postureo, la obsesión por la imagen, por el tamaño, por el sexo… No sabemos si las nuevas tecnologías han ayudado a mejorar las relaciones humanas, seguramente no, pero en “Grinder, el musical” tienen claro que, por encima de todo, está la libertad sexual. Una mezcla de musical y cabaret en la que caben todos los estilos, desde el reggaetón, a la balada pasando por el flamenco o los cantos gregorianos. Nada se le resiste a esta compañía irreverente y a este musical cargado de energía positiva en el que también hay espacio para la crítica política.
Con un público muy entregado, asistimos a este nuevo fenómeno de musical-cabaret en el que no hay espacio para la timidez ni la solemnidad. La cuarta pared se cae desde el primer momento del show para que el público interaccione con los seis protagonistas. Éstos recorren el escenario y el patio de butacas como peces en el agua, haciendo las delicias de los asistentes, que no paran de reír. Música, humor y sexo. La irreverencia necesaria para seguir siendo libres.
JH
Pésima y aburrida. No tiren el dinero. Como homosexual me senti insultado. Los actores cantan fatal.