‘El Test’, todos tenemos un precio
04/10/2016
María Sainz-Trápaga Carbajo
Existen tests y experimentos psicológicos, que a pesar de su aparente sencillez, ayudan a predecir la personalidad. Un ejemplo es el conocido como “test de la golosina”. Le pones una chuche delante a un niño, y si aguanta sin comérsela, a los 15 minutos recibe una segunda como recompensa por su autocontrol. Pero, ¿cuál es la golosina más apetecible para los adultos? Creo que la respuesta es más que evidente…
Pues esta es la premisa de la que parte Jordi Vallejo en su obra ‘El Test’, someter a un grupo de adultos a un dilema, el test de la golosina para adultos; ¿cien mil euros ahora o un millón dentro de diez largos años? Si encima se trata de dos parejas totalmente opuestas entre sí, y con secretos de por medio, el drama (o en este caso la comedia) están servidos.
Todo comienza cuando Toni (Luis Merlo) invita a Paula (Maru Valdivielso) y su marido Héctor (Antonio Molero) a cenar a su lujoso y recién estrenado ático. Es entonces cuando les comenta, de forma anecdótica, el curioso test que está utilizando su novia Berta, una psicóloga de éxito interpretada por Itziar Atienza.
Mientras que Paula se vuelve loca intentando decidir qué opción elegiría y si sería algo ético y moral, Héctor parece tener muy claro que los cien mil euros les solucionaría la difícil situación económica que están atravesando. Pero todo deja de ser hipotético en el momento en que Toni decide ir más allá, y convertir el experimento en algo real. Esto hace que la pareja saque a flote todos sus miedos e indecisiones, mostrando una vez más, que jamás se pondrán de acuerdo en nada. Es entonces cuando hace su entrada triunfal la genial Berta, como siempre psicoanalizando, dominando y controlando la situación, sin que nada se le escape… ¿o sí?
A destacar de la obra, por supuesto, el guión, compuesto por un humor veloz y ágil, más típico de las sitcom de televisión que del teatro. Y por supuesto, las interpretaciones, cuanto menos magistrales. De Luis Merlo poco más se puede decir, quienes hemos seguido de cerca su meteórica carrera televisiva y teatral, sabemos que se trata de uno de los grandes del panorama nacional. Con poco es capaz de dar mucho, y con cada frase de su personaje, se crece más y más, para provocar en el público una carcajada tras otra, casi sin descanso. Y ojo, que tampoco se queda atrás Antonio Molero, o como estamos más acostumbrados a llamarle, «el Fiti de Los Serrano«. Ni siquiera Merlo es capaz de hacerle sombra, en ese genial duelo cómico que comparten en escena para deleite de todos. Mientras que Maru e Itziar, ponen la (aparente) cordura y seriedad en todo este asunto.
Como es habitual en situaciones en las que hay mucho dinero de por medio, todos los personajes son llevados al límite de una manera agobiante y a la vez maravillosa, aflorando lo peor de cada uno.
En definitiva, ‘El Test’ es una sorpresa más que agradable, que nos deja un muy buen sabor de boca y, ya de paso, un par de incógnitas personales, ¿entonces, los cien mil euros o el millón? ¿Realmente todos tenemos un precio?
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